Sonia Franco es una de las periodistas que se ocupan del tema del trabajo, una de las que seguimos, tanto que al llegar a su artículo sobre los ninis y los cincuentones no hemos podido responderla. No se merece el silencio.

Sonia, el problema no es de grupos. Los ninis, los cincuentones, los treintañeros son grupos vuestros, de los periodistas. En casa, todos son el mismo problema, el joven, el mediano y el veterano que no encuentran salida a sus capacidades individuales.

Soltar que nadie parece dispuesto a hacer nada por ellos es crear falsas expectativas y desincentivar la solución individual a cada problema individual. ¿O insinuas que la principal preocupación de Rajoy ahora mismo es esa o debería serla?

Si al headhunter le ponen 45 años como tope para los candidatos y lo acepta habría que pasar de ese headhunter que acepta la discriminación por edad y no por cualificación y harías un favor a tus lectores identificándolo en vez de echarte a temblar.

Si luego apuntas como solución apelar a la responsabilidad social de las empresas es que o juegas con ellas o juegas con tus lectores pero no te vamos a poder tomar en serio.

Vuelves a soñar con los reyes magos al tocar las ayudas del Estado. ¿El Estado está ayudando ahora? ¿No has oido hablar nada de recortes?

Sociologizando o politizando el problema no lo resolvemos. Ridiculizas la solución individual cuando hablas del hijo/sobrino enseñando a manejar Twitter. Y no se trata de empleabilidad sino de venta individual inmediata, de afilar los servicios individuales a lo que los empleadores están comprando. Claro, que igual nos equivocamos.