Si no, recuerda tu cuello tieso ante la pantalla o la nuca de cartón, el dolor de espalda de estar mal sentado, la sensación de mano hinchada por un ratón o los dedos locos de tanto Blackberry. Y el dolor de cabeza, la vista cansada…. ¿Verdad amiga tímida que quieres hacerlo todo bien y no te mueves de la mesa en 8 horas? ¿Verdad ambicioso jovencito que quieres acabarlo todo antes del exigente plazo que te han marcado? ¿Verdad querido autónomo que trabajas muchas más horas que cuanto eras heterónomo? ¿Verdad querido compañero que cuando entraste firmaste un papel que decía que habías recibido un curso de prevención de riesgos? Ningún contrato nos obliga a tener dolores. Es más, legalmente estamos obligados a prevenirlos. Pero nos descontrolamos, sí, nosotros solitos, y eso, entre otras muchas cosas, es una falta evidente de autorregulación, una competencia que lleva muy, muy directamente a la buena vida (profesional). Así que aquí van algunas sugerencias analgésicas. .
Descansos frecuentes Mucho de los dolores vienen del estatismo, de estático, posturas o movimientos reiterativos mantenidas en el tiempo. Una solución, descansos breves cada 30 ó 40 minutos. Puedes levantarte para ir a la impresora, ir a beber un vaso de agua, ir al WC… No tienes que abandonar tu mesa: puedes ponerte de pie un rato, para hablar por teléfono, o sentado, echar los hombros hacia atrás varias veces, relajar la cabeza y el cuello moviéndolos en varias direcciones. Otra solución, las reuniones peripatéticas. Cuando tengas que hablar con alguien o reunirte, podéis hacerlo paseando por el pasillo. Estarás a la última. .
El teléfono Como demostró Harrison Ford en «Armas de mujer», hablar por teléfono sujetándolo entre el hombro y la oreja te permite cambiarte de camisa y crearte una imagen chic e hiperactiva que da puntos para el ascenso. Pero como éste se retrase te puedes destrozar el cuello y la espalda. Tu verás. Es difícil que Telefónica o Vodafone financien una investigación sobre las propiedades cancerígenas de fijos y móviles. Por si acaso, reduce tu dosis: utiliza los manos libres o pon el altavoz siempre que sea posible. .
La pantalla del ordenador Mejor a la altura de tus ojos o 5º o 6º más bajo. Si usas bifocales, 20º o 30º más bajo. La distancia, a la que tus ojos estén cómodos. Que no tengas que guiñar. .
La silla El tronco pegado al fondo de la silla, aprovechando el respaldo lumbar en la espalda baja, una de las que más sufre. Con una ligera inclinación hacia atrás del respaldo, 110º-120º, sin giros ni inclinaciones laterales. La cabeza no inclinada más de 20º. Evitar los giros frecuentes. Cuello y hombros relajados, sin inclinarse hacia adelante. Los antebrazos, horizontales, sobre el reposabrazos de la silla y próximos al cuerpo. El codo formando un ángulo de 90º o menos. Regular la altura de la silla de forma que las muñecas no se doblen al escribir en el teclado. Te juro que no es malabarismo, es posible.
El ratón La muñeca sin doblar, en línea con el eje del antebrazo. El final de la palma apoyada en una alfombrilla. El tamaño del ratón debe permitirte mover sólo los dedos.
Piernas y pies Los muslos, casi horizontales. Los pies descansado en el suelo o en un reposapiés, de forma que las rodillas estén ligeramente más bajas que caderas. Señoras, sin tacones por favor.
Ojos Los mayores de 40 años necesitan hasta un 40% más de luz. Una iluminación auxiliar próxima al ordenador resuelve el problema. Un descanso visual consiste en cambiar el enfoque, mirar a larga distancia, de vez en cuando. Un lugar que permita mirar por la ventana, a lo lejos, es lo ideal. Si aprendes a escribir sin mirar el teclado, mucho mejor para tu vista.
Síntomas No esperes a quedarte minusválido para ir al médico. Si sientes entumecimiento u hormigueo en manos, brazos o codos o tiras cosas con frecuencia, papel, vasos, puedes estar empezando a padecer estrés «repetitivo». Y para jugar al solitario, cómprate un baraja.
Muy interesante el artículo y muy sabios consejos. A veces no nos damos cuenta de nuestra postura en el trabajo y después nos pasa factura.
Para leer más sobre este tema, visitad el blog de empleo de Universia: http://empleo.universiablogs.net/mala_postura_en_pc_ergonomia
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